La preparación del
Mundial de Qatar es un tren que avanza a toda marcha. En esta oportunidad, Axel
Preuss-Kuhne comparte la mirada del periodista David Conn, quien visitó
recientemente Qatar e hizo un balance del pasado, presente y futuro del Mundial
del 2022.
Axel comparte apartes
del artículo de David, titulado Four years out: How is Qatar building up to the World
Cup? y publicado el 20 de noviembre de 2018 en el sitio web
irishtimes.com.
El Mundial de Qatar comenzó en el 2010
El evento deportivo
más importante del próximo año 2022, comenzó hace casi una década como la
apuesta más inviable para organizar una Copa del Mundo: una propuesta extravagante
para estadios “enfriados por aire”, en el desierto de un diminuto emirato árabe
con una ciudad, Doha, poblada por sólo 300.000 personas. Sin embargo, Qatar es
el Estado per cápita más rico del mundo, y en esa fría noche de Zurich en
diciembre de 2010, su candidatura logró obtener la mayoría de los votos del
comité ejecutivo de la FIFA, y reclamó el derecho a albergar la Copa Mundial
2022.
Desde entonces Qatar
organiza el torneo y el eslogan en Doha es "Deliver Amazing", con su
misión declarada de unificar a las personas en el Medio Oriente y proyectar una
experiencia árabe positiva. Pero Qatar ha sobrevivido a un huracán de desafíos.
Ha habido oleadas de acusaciones de corrupción, que el secretario general del
"comité supremo" que organiza la Copa del Mundo, Hassan al-Thawadi,
negó repetidamente, denunció y rechazó airadamente como prejuicio antiárabe.
Las investigaciones
intensivas de la FIFA sobre la votación no encontraron que la oferta de Qatar
fuera más irregular que la de Australia, o la de Inglaterra para 2018, y la
investigación criminal del FBI sobre los barones de la FIFA en el continente
americano no ha arrojado nada sólido contra Qatar. Ha habido una condena
internacional al régimen de Qatar por el manejo de los trabajadores migrantes,
y es por esto que el gobierno adelanta un proceso de reforma en asociación con
la Organización Internacional del Trabajo. En junio del año pasado, estallaron
hostilidades políticas en la región y Qatar sigue sujeto a un bloqueo liderado
por su vecinos Arabia Saudita, los
Emiratos Árabes Unidos, Bahrein y Egipto.
Sin embargo, los preparativos
dentro del país continúan casi sin problemas, y ahora Qatar parece estar más
cerca de un torneo que se transforma de 32 a 48 equipos y hacer posible que el
país comparta algunos partidos con otros países de la región. El calendario de
fútbol ya se ha reordenado: mover la Copa del Mundo de verano a invierno por
primera vez, para escapar del calor del desierto.
Estadios "enfriados por aire": Toda una revolución
tecnológica
Así que en cuatro
años, el 21 de noviembre de 2022, la Copa del Mundo realmente comenzará en
Qatar, en uno de los siete estadios completamente nuevos, totalmente
refrigerados por aire, con 80.000 asientos en el recién construido distrito de
Lusail en Doha, sede de la final el 18 de diciembre. Y como siempre se
pretendió, cuando el ambicioso Sheikh Hamad bin Khalifa al-Thani, presionó a
Qatar para que presentara su candidatura, el país será el anfitrión del torneo
deportivo más visto en la tierra.
En un país que se
enriqueció rápidamente más allá de lo imaginable debido a su explotación
pionera de gas natural líquido, la bonanza ha creado una ciudad del golfo de
rascacielos y centros comerciales, que puede poner una Copa del Mundo desde
cero. Thawadi calcula el presupuesto oficial para la construcción específica de
la Copa del Mundo entre 8 y 10 mil millones de dólares, aunque esto se refuerza
con los 200 mil millones de dólares que se gastan de manera más general para
tener un nuevo sistema de metro y una gran infraestructura lista para 2022.
En Qatar, resulta
sorprendente lo avanzados que están los planes. El único estadio de la Copa del
Mundo que no se construyó desde cero, el estadio Khalifa International, que lleva el nombre del
padre Sheikh Hamad depuesto en un golpe de estado en 1995, tuvo su
reconfiguración y fue completada el año pasado. Quienes han tenido la
oportunidad de pararse en su pista que albergará el Campeonato Mundial de
Atletismo del año que viene, pueden observar las bóvedas y el magnífico toldo
del techo, y sienten que funciona el enfriamiento por aire. El sistema de
enfriamiento fue desarrollado por un científico en la universidad de Qatar, el
Dr. Saud Ghani, y es sorprendente: es como un aire acondicionado en el
exterior.
De los ocho estadios,
quizás el más simbólico es el Al Bayt, con 60.000 asientos, que se encuentra en
una fase de construcción avanzada en Al Khor, un distrito actualmente
polvoriento a 20 millas al norte de Doha. El diseño de Al Bayt es un tributo a
las tiendas de campaña utilizadas por los nómadas de Qatar antes de que
lloviera el dinero. Pasando por allí, se puede ver la declaración televisiva
que hará Qatar en 2022: "Mira mundo, éramos antes habitantes de la tienda,
y mira todo lo que podemos hacer ahora".